UN POQUITO SOBRE MÍ

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Me llamo María, nací un veraniego día el 17 de junio de 1994 en un pueblo de La Rioja, "La provincia del vino".

Me considero una persona extrovertida, abierta y espontánea y sobretodo amiga de mis amigos, aunque tengo que decir, que a veces tengo bastante carácter.
La gente que me conoce suele decirme que soy bipolar y bueno... puede que lleven un poquito de razón porque puedo estar deprimida totalmente y al minuto empezar a saltar, sonreír  y bailar. Es cierto, que a veces ni yo misma me entiendo, pero, eh! me encanta ser así, si no, no sería yo y pienso que mi vida sería más aburrida.


Mi padre se llama Pedro y mi madre María Teresa he tenido la suerte de que no me pusieran dos nombres, como a mi hermana mayor, se llama Sara Gabriela, suena como a culebrón, aunque mi vida en sí podría considerarse uno de ellos.
Siempre he sido muy curiosa, como casi todos los niños, pero todo el mundo notaba que yo lo era aún más. 
Pero, ¿sabéis que es lo que más odio yo en este mundo? LOS LUNES. Vale que el pobre no tiene la culpa de mis males, y que si no odiase el lunes no me gustaría tanto el viernes, eso es justamente lo que siempre me digo el domingo, que por las tardes ya empiezo a odiar al Señor Lunes. 

En cuanto a mis amigos siempre he sabido escogerlos al milímetro, llega un momento en el que te das cuenta que debes decidir quién es imprescindible en tu vida y quién no, aunque soy consciente de que personas que no tenían que haberse ido de mi lado, lo han hecho. Siento un odio irrefrenable a los amagos de amigos. Yo soy de las personas que prefieren quedarse con ese tipo de personas a las que no hace falta decirles nada para que te entiendan, de esas personas que saben cómo vas a actuar en cada momento. soy una persona que se  siente feliz intentando hacer que los demás también lo estén. sacando una pequeña sonrisa cuando veo a alguien que no está bien, por ello siempre intento animar a las personas que me importan, o incluso  darles un achuchón para que lo hagan.


En cuanto a mi formación... destaco sobre todo aquél gran gigante llamado Bachillerato, ese curso en el que, quien más, quien menos, ha sufrido... es entonces cuando se fragua el camino de rosas en el que me encuentro ahora. Al terminar mis pruebas de acceso a la universidad, me doy cuenta de que para estudiar lo que quiero, publicidad, tengo que alejarme de todas las personas que han formado parte de mi vida. Un día te levantas, echas la vista atrás y te das cuenta de que estás,  en Segovia, en el medio de la estepa  Pero desde el primer momento, tuve claro, que quería estudiar publicidad y relaciones públicas, y en Segovia, ya que me habían recomendado dicha ciudad como una de las mejores ciudades de España donde cursar dicho grado. Es entonces cuando te das cuenta de que tienes que reconstruirte en otro lugar... 
 Hoy en día no me arrepiento de la decisión tomada, ya que sentí muy a gusto aquí;  he conocido a personas maravillosas y  he descubierto que este grado me gusta bastante 

Espero poder seguir trabajando como hasta ahora y obteniendo buenos resultados para así poder trabajar en lo que quiera y poder visitar diferentes países del mundo como Holanda, Alemania, New York  y también poder volver a otros como Praga, Londres, Roma,  en los cuales ya he estado pero así poder recordar momentos y reencontrarme con personas allí conocidas.
Para finalizar, tengo que decir, que me encantan los idiomas, la música el baile y el deporte como medios de distracción, y como no, me encanta pasar tiempo con mis amigos ya que con ellos, siempre comparto momentos inolvidables.
Debo concluir diciendo que en mi vida, poquito a poquito, trocito a trocito voy seleccionando las cosas que he de guardar en la cajita donde guardo las cosas que me importan, y lo que quede fuera, mira... a la mierda.